GUERRA DE BESOS

Tercera semana de campamentos y, como cada año, siempre pasa algo que me hace recordar que el mundo sigue en "funcionamiento". El año pasado fueron los atentados de Londres, hace unas semanas, los de Bombay, y ahora el Líbano. Esto ya viene de lejos (no creeis que demasiado?), pero cada muerte es el comienzo de un odio renovado. El caso es que por unas cosas o por otras, siempre pasa algo que hace que reaccione y recuerde que estas cuatro paredes, o estos monitores (geniales) o estos increibles pueblos y ciudades que este trabajo me permite visitar no son el límite del mundo.

El otro día, jugando con mis peques en un parque, me dió por pensar... Les propusimos un juego que se llama "La Guerra de Besos". Para jugar, los niños tienen que hacer grupos y cada grupo tiene que pintarse los labios de un color diferente. El objetivo del juego es dar besos a los componentes del equipo contrario; el equipo que más manche con su color al resto de equipos es el que gana. Los veía jugando (monitores incluidos, claro), corriendo por todo el parque, gritando como locos, y, aunque el nombre del juego incluía la palabra guerra, creo que eran realmente felices. Esos mismos niños canviados de escenario (en este caso el Líbano) podrían estar viviendo una guerra de verdad. No sé si llamarlo suerte o injusticia, el caso es que tube la suerte de disfrutar mucho viendo a esos niños jugar.

No sería genial que las únicas guerras del mundo fueran como esta?